La ciberdelincuencia en España ha experimentado un aumento alarmante, marcando un punto de inflexión en la lucha contra el crimen en el espacio digital. Según datos presentados en 2022 se contabilizaron 375.506 infracciones penales relacionadas con la ciberdelincuencia, lo que representa un incremento del 72% respecto a 2019. Este notable incremento se ha manifestado en un contexto donde «uno de cada cinco delitos se cometen en la red»
