El pádel (del inglés paddle) es un deporte de raqueta con origen en México. Se juega siempre en parejas y consta de tres elementos fundamentales para su desarrollo: la pala, el campo de juego y la pelota. Pero cuando un deporte propio o ajeno se mezcla con el descanso que se debe tener en una vivienda, comienzan los problemas legales. El ruidoso pádel.
El ruidoso pádel
El auge del pádel como deporte de moda es innegable. Ha traído la proliferación de pistas en urbanizaciones, terrenos sin urbanizar que ven el negocio y se forran, “huecos” entre comunidades y complejos deportivos en toda España. Esta cercanía y este hábito social ha traído consigo una problemática creciente Cada día consultan más cómo acabar con el ruido que genera la práctica de este deporte, que llega a afectar a la calidad de vida de los vecinos cercanos, sin impedir por otro lado su práctica.
Tanta razón tienen unos como otros pero gana siempre el derecho a no ser molestado. En términos legales, la normativa vigente establece que los niveles de ruido dentro de las viviendas no deben superar los 35 decibelios durante el día cuando se mide con las ventanas cerradas. Este límite tiene como objetivo proteger el bienestar de las personas incluso si viven cerca de instalaciones deportivas como pistas de pádel. Sin embargo, a pesar de estas regulaciones, las molestias persisten y, en algunos casos, derivan en disputas legales muy graves, problemas vecinales y odios y rencores que posiblemente no se acaben nunca.
El derecho a no ser molestado por ruidos excesivos es un principio que, aunque pueda parecer básico, requiere una protección activa. La jurisprudencia ha demostrado que los tribunales no son ajenos a esta problemática. Se han emitido sentencias que reconocen la gravedad del ruido procedente de instalaciones deportivas, incluso cuando dichas instalaciones se encuentran en un marco legal aparentemente correcto.
Condenas por ruido.
Existe incluso condena penal en varios casos consultados. En Espartinas, Sevilla, un administrador de un centro deportivo privado fue condenado por la Audiencia Provincial a seis meses de prisión y al pago de dos multas. También a pagar una indemnización a los vecinos afectados. La sentencia se basó en que los niveles de ruido provenientes de las pistas de pádel, gestionadas por el acusado, superaban los límites legales establecidos causando perjuicios a los vecinos. Estos sufrieron trastornos adaptativos ansioso-depresivos como resultado del ruido continuo.
Este caso subraya la importancia de que las comunidades de propietarios y los gestores de instalaciones deportivas tomen medidas preventivas para evitar conflictos de este tipo. Y si se quiere seguir “montando” pistas cerca de viviendas sólo existe una solución: la insonorización. La instalación de paneles de sonido y otras tecnologías para controlar el eco y reducir la reverberación dentro de los espacios deportivos es una inversión necesaria para minimizar el impacto del ruido.
Qué hacer.
La ley también es clara en cuanto a la responsabilidad de los dueños o administradores de estas instalaciones. No basta con cumplir con la normativa urbanística. Es imprescindible asegurar que las actividades no vulneren los derechos de los vecinos. El hecho de que una comunidad de propietarios apruebe por mayoría la instalación de una pista de pádel no exime de la responsabilidad de garantizar que dicha instalación no genere molestias. Idem si Ud. cree que por tener licencia para instalarlas en un “campo” su vecino, que tiene un chalet desde hace más de 30 años, debe soportar los ruidos y los golpes. De eso nada.
En casos donde las instalaciones deportivas no sean comunitarias, sino municipales o privadas, los vecinos afectados pueden y deben buscar también el apoyo de su comunidad para iniciar acciones legales. La denuncia al ayuntamiento o a las autoridades competentes es directa. Puede lograr la suspensión de la actividad o medidas correctivas como la insonorización o limitación de horarios de uso.
Si Ud. o algún conocido, o su comunidad, se encuentra en una situación similar y necesita asesoramiento legal, le invitamos a ponerse en contacto con nosotros. Posiblemente podamos encontrar una solución para su caso. No dude en pedir una cita previa, presencial, telefónica o por videoconferencia de una o media hora en el teléfono 966171294 o enviando un mensaje al Whatsapp 628425987.
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