La dificultad creciente de los juicios de familia, y el retraso endémico de los Juzgados…

La dificultad creciente de los juicios de familia, y el retraso endémico de los Juzgados…
Es un hecho objetivo que “los españoles” no se ponen de acuerdo en nada. Para muestra, las “autonomías”. Esto es de locos y a nivel legislativo y de idiomas ni les cuento. Aquí no hay quien se sepa si una ley se aplica, o se ha modificado, de lo cambiante que es. Tampoco es un país que cumpla voluntariamente con el fisco, por motivos históricos supongo, ni que acate voluntariamente leyes ni órdenes;
Sí, si cierta la casuística pero… ¿Papá Estado manda sobre el padre a través de la Administración de Justicia? ¿no se trataba de resolver a cuál de los dos progenitores se le asignaba la responsabilidad de la decisión de vacunarla o no, y no decidir a favor del que sostiene la versión más «polite» o actual llevando el juicio a derivar a que «la vacuna es buena y debe ponérsela?
Sin que el criterio médico sobre el coronavirus o covid19 (el que sea) prevalezca, y llevándonos la discusión a un terreno estrictamente jurídico, concretamente al expediente de jurisdicción voluntaria (art. 156 del Código Civil), sigo sin tener claro qué criterio jurídico sería el decisivo para que el menor, finalmente, reciba la vacuna o no.
Si los jueces de Familia de los Juzgados de Primera Instancia aplicaran, directamente, lo que dice el Tribunal Supremo sobre este tema, quizá otro gallo nos cantase. No sólo liberarían de trabajo a las Audiencias Provinciales, sino que darían a los letrados armas contundentes para explicar a sus clientes qué criterios son o no son aplicables como, v. gr., si se aplican las famosas tablas de alimentos, si se puede o no pedir una pensión compensatoria, si se atribuye la vivienda familiara a uno u otro, cuánto tiempo y quién paga qué cosa de dicho inmueble. Sabiendo, así, lo que un juez debe o no aprobar (lo que se llama “seguridad jurídica”) plantear la demanda en tales términos y con hechos objetivos sería cosa hecha.
En estos últimos 25 años he atendido a miles de clientes con problemas reales y objetivos. Un abogado tiene clara cuál será su intervención al poco tiempo de la visita tras ver los documentos que le traen, o escuchar datos concretos, e inicia la operación “salvar al justiciable” lo antes posible.
Una pandemia, una alarma, un confinamiento, justo o injusto, legal o ilegal, es cosa seria pero… ¿qué hizo la Administración de Justicia desde marzo a junio, incluidos? NADA. ¿Preparó o diseñó planes sabiendo que podría volver el caos? NADA. ¿Ideó algún programa o aplicación para acelerar el trabajo de miles de funcionarios, letrados y procuradores, sin tener que acudir a las Sedes? NADA. ¿Puso a trabajar a toda máquina a los funcionarios, dotándolos de medios y posibilidades? NADA. ¿Qué ha hecho desde junio a agosto? NADA. ¿VA A REPETIRSE?