¿Ha ido últimamente a retirar dinero en efectivo a la ventanilla de su banco? ¿Le han dicho eso de que “su dinero no es suyo”? Si lo ha hecho habrá comprobado en propia persona que el empleado del banco que le atiende le pregunta, literalmente, para qué o a dónde va a destinar el dinero…pidiéndole que le den una razón por la cual lo retira en efectivo para disponer de él y no hacer transferencia o moverlo de otro modo. Sí, su propio dinero. Sí, su propio banco, el de toda la vida.

Su dinero no es suyo

Por María Martín Robles.

Esta intromisión en su vida privada, su patrimonio y su honra si me lo permiten (nunca se sabe los vicios para los que uno puede retirar el dinero que le ha costado tanto ganar) no tiene justificación legal. No existe normativa bancaria alguna que establezca una obligación de los clientes del banco de justificar el uso que van a darle a sus euritos. No pueden, y hablamos de cuentas corrientes de ahorradores normales (todos nosotros) siquiera preguntarles el destino del dinero ni negarse a facilitar el importe solicitado si no les proporcionan dicha información. Por tanto, la próxima vez que vaya Ud al banco y le pregunten para que lo saca, no les responda. Y si se niegan a entregarles las cantidades solicitadas llamen al 091 y pongan una queja escrita tras solicitar la hoja de reclamaciones.

Su dinero no es suyo

Caso distinto es la obligación legal del banco de avisar a Hacienda cuando se disponen de cantidades en efectivo que superan una determinada cifra. No hay que confundirlo. Debido a la lucha que existe contra el blanqueo de capitales la legislación ha cambiado y se ha ido endureciendo con respecto a los límites de retirar o sacar dinero de los banco. En estos momentos, los bancos avisan al Banco de España y, a su vez, a Hacienda en el momento en el que la cantidad de dinero retirada o ingresada es igual o superior a 1.000 € en un mismo día.

La limitación del efectivo está llegando a situaciones verdaderamente dramáticas. Esto significa que la Agencia Tributaria, que sí que dispone de competencia legal para hacerlo por ser un ente público, puede pedirnos que justifiquemos de dónde viene la cantidad de dinero en efectivo que ingresamos, o cual va a ser su destino. Esto puede pasar no sólo si la cantidad de dinero supera los 1.000 € en un mismo día, sino también si se hacen ingresos o retiradas de efectivo de cantidades considerables de manera regular. Vamos, que casi es mejor no ir a un banco pero, cuidado, pues por la misma razón cuando ingrese ud cantidades elevadas en él, por tenerlas en otro sitio, quizá le busquen las cosquillas.

Su dinero no es suyo

Parece de locos tanto control, y más si lo realizan las entidades bancarias (no tienen competencia legal para hacerlo) y la realidad es que no es nada práctico y afecta negativamente a los profesionales liberales y autónomos. Hoy, por ejemplo, un cliente nos ha contado que no ha podido cobrar 2000 euros a un tercero (perfectamente legal que sea en efectivo pues ya le había dado una factura) y no lo ha podido cobrar pues el banco le ha exigdo a su clienta que le justificase para qué quería realizar la disposición del dinero en efectivo. Al no aceptar que dicha persona no les dijera el destino de forma clara, y al pedirle justificación documental (no es broma), se ha tenido que ir con las manos vacías teniendo que volver mañana con la factura en mano para que el banco esté conforme y le entregue el dinero. Todo ello con el correspondiente trastorno en su trabajo pues, como las sucursales tienen el horario tan limitado, ha tenido que pedir permiso dos días en el trabajo. Lo anterior, no lo crean, no es ninguna broma.

Otra situación frecuente en la que nos podemos encontrar cuando queremos retirar dinero de la ventanilla es que nos digan que debíamos haber avisado de que íbamos a hacer tal disposición de efectivo, y que como no lo hemos hecho no podrán facilitarnos las cantidades solicitadas hasta dentro de unos días. Pues bien, igual que en el caso anterior, no existe normativa bancaria alguna que establezca una obligación de preavisar con una antelación mínima determinada para realizar una retirada de efectivo, ni siquiera que establezca la obligación de preavisar. Su dinero, si está en cuenta corriente, se podría retirar todo y en directo. Vamos, el mismo día.

Los bancos tampoco pueden imponer a los clientes, por “política de empresa”, restricción de únicamente realizar retiradas de dinero, ingresos o cualquier tipo de operaciones en la sucursal donde se abrió la cuenta (esto es algo muy habitual pero NO lo pueden hacer). Los clientes pueden operar en cualquier sucursal de la entidad bancaria sin limitaciones, salvo que en el contrato con la entidad bancaria disponga lo contrario, hecho que debe ser probado por el banco. En caso de que no exista tal previsión contractual, no pueden negarse a realizar la operación que solicita Ud.

Su dinero no es suyo

Cosa distinta es que en la sucursal no haya suficiente dinero (sí, es algo que pasa). No obstante, también es habitual que debido a la política de la entidad intenten evitar a toda costa a las disposiciones de efectivo. A quién no le ha pasado que ha acudido a su sucursal a retirar dinero o a ingresarlo y le han mandado al cajero o le han recomendado hacerlo por transferencia (a mí misma la semana pasada).

En estos casos tenemos que tener claro que somos los acreedores del banco y no pueden negarse a darnos nuestro dinero en el instante en que se lo requerimos sin excusas y sin preguntas (salvo que en la sucursal no dispongan de dicha cantidad). Es más, en ningún caso pueden cobrarnos por disponer de nuestro dinero, incluidas las transferencias, los cheques, etc…, pues son operaciones libres de comisiones. Habida cuenta y, sobre todo, en el caso de que el banco nos esté obligando a utilizar dichos servicios debido a su negativa a entregarnos el dinero en efectivo o a aceptar el ingreso del mismo.

Por tanto, ya lo saben: cuando vayan a cualquier sucursal de su banco y se nieguen a entregarles el dinero solicitado, diciéndoles que “Su dinero no es suyo”, líenla parda o pidan cancelar su cuenta marchándose de dicha sucursal. Esto, claramente, está llevado al extremo.

María Martín lleva muchísimos casos de bancos en www.javierbeltranabogados.com