VIVIR PARA SIEMPRE
¿Quién quiere vivir para siempre? lo cantaba Queen en la genial banda sonora de “Los inmortales”. Se nos ponían los pelos de punta con esos violines desgarrados de fondo cuando el escocés Connor MacLeod, interpretado por Christopher Lambert, veía cómo… no sigo por si Ud. no la ha visto (se la recomiendo aunque ya esté trasnochada)
Yo no creo que sea tan divertido vivir para siempre si no tienes mucha salud, dinero, y digo mucho-mucho, y además con quién vivirlo. Y ni aún así. Fíjese ahora una tarde que se le queda libre y nadie se toma con Ud. ni un gintonic porque está trabajando, cuidando a la prole o porque no es de su apetencia. Pues imagine con 95 años.
Pero vamos, que esto no es, ni por asomo, un canto a la desaparición-programada a los 80 años, que luego esto lo leen y le fusilan a uno. Además, estará Ud pensando en su madre que está más fresca que una rosa y de la que no quiere separarse nunca. No, no es esto. Tengo soluciones que daré más abajo.
El “problema” es que vamos a vivir 100 años, cuando recientemente (el mundo es joven) tenías suerte -véase Juego de Tronos- si llegabas a los 35. No hemos aprendido de la naturaleza y la economía manda. Está todo “mal montado” y si uno se jubila a los 65 le quedan, según avances, unos 35 años para leer periódico, mirar obras en construcción, jugar a la petanca y acompañar a sus nietos-sobrinos al colegio.
A partir de esa edad, 65, dirán Uds., el mundo se abre. Pero es mentira: comienzan los achaques y llamas al geriatra por su nombre de pila, quedas retirado de la circulación profesional si te jubilas y las historias de cómo lo hacías tú ya no le interesan a nadie. Tu higiene personal se descuida, te da todo igual y dices lo que quieres. Dejas de ser runer y comienzan a pedirte que compres el pan, la leche, que vayas a la guardería…Si tienes suerte, te dejan hacer maquetas de aviones que nunca hiciste pero que siempre quisiste hacer. Lo peor, te llegan cartas del IMSERSO y comienzas a pensar que ir a Tenerife con un “todo incluido” en Diciembre no es mala idea. Ni hablar de sexo…¿qué es eso?
Ahora en serio. El INE (Instituto Nacional de Estadística) es el gran ojo de Sauron que todo lo ve y todo lo tiene estudiado. ¿Preparados? Adelante con la esperanza de vida.
VIVIR PARA SIEMPRE
En las últimas décadas ha aumentado significativamente la esperanza de vida en hombres y mujeres. La esperanza de vida es el indicador más ampliamente utilizado para realizar comparaciones sobre la incidencia de la mortalidad en distintas poblaciones y, en base a ello, sobre las condiciones de salud y nivel de desarrollo de una población. En los países occidentales, la esperanza de vida ha experimentado notables avances en el último siglo, y se ha conseguido con disminuciones en la probabilidad de morir debido a los avances médicos y tecnológicos, reducción en las tasas de mortalidad infantil, cambios en los hábitos nutricionales y estilos de vida, mejora en los niveles de condiciones materiales de vida y en la educación, así como el acceso de la población a los servicios sanitarios. La diferencia entre hombres y mujeres en años de esperanza de vida al nacer y a los 65 años ha disminuido en los últimos años. El aspecto clave en la evolución de las últimas décadas ha sido la mejora de las expectativas de vida en las personas de edad madura y avanzada.
¿Quiénes viven más?
La diferencia en años de esperanza de vida al nacimiento a favor de la mujer creció o se mantuvo estable en España hasta mediados de los años noventa, como consecuencia de una mortalidad masculina más elevada debida a factores biológicos, estilos de vida y conductas de riesgo. Pero esta diferencia a favor de la mujer se ha ido reduciendo en las dos últimas décadas, 7,1 años de diferencia a favor de la mujer en el año 1994, 6,6 años en el año 2004 y 5,5 años en el año 2014. En España entre 1994 y 2014, la esperanza de vida al nacimiento de los hombres ha pasado de 74,4 a 80,1 años y la de las mujeres de 81,6 a 85,6 años, según las Tablas de mortalidad que publica el INE.
En la Unión Europea, en el año 2014 la brecha de género a favor de la mujer en la esperanza de vida al nacimiento era de 5,5 años en la UE-28 y de 5,8 años en España. Para el mismo año, la brecha de género a los 65 años era de 3,4 años en la UE-28 y de 4,2 años en España. Según estas proyecciones, la esperanza de vida al nacimiento alcanzaría los 84 años en los hombres y los 88,7 en las mujeres en el año 2029, lo que supone una ganancia respecto a los valores actuales de 3,9 y de 3,1 años respectivamente.
Pero, atención, estos valores serían de 91,0 años de esperanza de vida al nacimiento para los hombres en el año 2063 y de 94,3 años para las mujeres en el año 2063. Las mujeres que en el año 2029 tuvieran 65 años vivirían en promedio 25,6 años más y en el caso de los hombres 21,8 años más, frente a los 22,9 años de supervivencia actuales para las mujeres a los 65 años y a los 19 años de supervivencia actuales para los hombres a los 65 años de edad.
¡¡Uuufffff!! ¿Entonces, qué hacemos?
VIVIR PARA SIEMPRE
Tengo muchas ideas bastante delirantes, fruto de networking con amigos, y seguro que son “infalibles”. Allá van.
Lo primero, retrasar las exigencias a los más enanos: no irán al colegio hasta los 10 años, por lo que durante este tiempo Ud. les enseñará las artes de la vida y disfrutará de ellos (¿no es lo que piden ahora en los Juzgados?) Pues eso: formará personas y no robots maleducados, egoístas y caprichosos.
Segundo, y por esta circunstancia, antes de elegir si van a la Universidad o qué hacen, deberán dedicar tres años a servicios sociales y otros dos al ejército, o al revés (de esto hablaremos en otro post) Imaginen la de dinero que ahorraremos si éstos van cuidando a los otros más mayores y encima defienden el país de amenazas que cada día serán más intensas.
Durante estos años, y con plena juventud, se hartarán de salir, runear, seducir, leer, ver TV y series y demás ocio y molicie. Aquí es donde se formarán de verdad y sabrán lo que quieren.
Tercero. El trabajo en serio, y una vez acabada la Universidad o enseñanzas u oficios varios, comenzará por ley a los 30-35 años (cuando ya sepan más o menos de qué va la vida) No habrá whatsapp y otros medios de comunicación inmediata para poder trabajar a gusto y con dedicación.
La edad fijada para la jubilación será a los 80-85 años, según la mente de cada uno, ya que seremos más sabios y más resistentes a cepas de virus.
El resto, improvisaremos.
Si han llegado hasta aquí, pensarán que vaya chorradas… ¿verdad?
Pues no, y si me permiten la ironía y el cinismo de todo este artículo…no es ninguna broma cómo hemos montado el sistema para que cuando uno llegue a los 50-55 esté quemado mentalmente como profesional, mientras que los que lo relevan, de 22-25 años, no tienen ni idea de nada… Pero…¿ y qué decir de cómo nuestros mayores ven sus ahorros mermados en su vejez cuando, además, lo prestan a hijos y nietos?
¿Se han dado ya cuenta de qué-quién decide y porqué vamos tan rápido…?
Por Javier Beltrán-Domenech.
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